El 64% de los emprendedores en España supera los 40 años y todos se quejan de la excesiva burocracia
Un nuevo informe de Holded muestra que sólo el 12,3% de los emprendedores en España tiene menos de 34 años, lo que sitúa al país a la cola de Europa. A pesar de que la pasión impulsa al 23,9% de los que abren un negocio, la financiación y la burocracia siguen siendo grandes obstáculos.
El panorama emprendedor en España mantiene no pocos puntos en común con el resto Europa. Según el Informe Emprende, un estudio reciente sobre negocios y emprendimiento en el Viejo Continente, elaborado por Holded, España muestra una realidad donde la pasión es el motor principal de los autónomos que deciden abrir un negocio, pero donde los obstáculos administrativos y financieros continúan frenando el crecimiento.
No obstante, uno de los datos más llamativos del informe es que España es uno de los países europeos con menor proporción de jóvenes emprendedores. Sólo el 12,3% de los propietarios de negocios tienen menos de 34 años. Una cifra que contrasta fuertemente con países como Francia y Bélgica, donde más de un tercio de los autónomos que ponen en marcha su propio negocio pertenecen a este grupo de edad.
Este dato refleja la consolidación de un panorama donde la mayor parte de los emprendedores españoles supera los 40 años, lo que puede indicar un enfoque más conservador, la vigencia del edadismo, que hace que numerosos profesionales no logren volver a ser contratados y busquen la vía del autoempleo o la existencia de barreras que impiden a los más jóvenes lanzarse al mundo del emprendimiento.
El 20% de los autónomos menciona la búsqueda de independencia como razón para emprender
El informe destaca que el 23,9% de los emprendedores en España se deciden a iniciar un negocio por una pasión personal. Esta cifra es superior al promedio europeo y coloca a España sólo por detrás de Suecia en términos de personas motivadas por el interés personal en un campo específico. Además, un 20% de los encuestados menciona la búsqueda de autonomía como una razón importante para emprender.
A pesar de esta motivación personal, sólo un 0,5% de los emprendedores españoles afirma iniciar su negocio con el objetivo de tener un impacto positivo en la sociedad, lo que refleja una menor inclinación hacia el emprendimiento social en comparación con otros países europeos. Un dato que, según los responsables del informe, invita a la reflexión sobre el papel del altruismo y la responsabilidad social en los nuevos negocios en España.
El informe no sólo recoge las motivaciones de los emprendedores, sino también las barreras a las que se enfrentan. En España, la burocracia sigue siendo un gran obstáculo. El 34% de los encuestados considera la legislación como un reto “complicado” o “muy complicado” al crear su negocio. Una ratio que pone en evidencia la necesidad de simplificar los trámites administrativos y facilitar el acceso a recursos que permitan centrarse en la verdadera gestión del negocio.
El 20% de los negocios emplean aún hojas de cálculo para gestionar sus facturas
Además, la falta de acceso a financiación sigue siendo una barrera importante. Un 24,3% de los emprendedores en España señala que acceder a financiación es uno de los mayores obstáculos para desarrollar su proyecto, superando la media europea. En particular, los países mediterráneos, incluido el nuestro, se enfrentan a mayores dificultades en este aspecto en comparación con otras regiones europeas.
Otro desafío significativo para los autónomos y pequeños negocios en España es la adopción de tecnología. Si bien el 59,1% de los negocios españoles ya utilizan software profesional para facturación, aún existe una dependencia notable de herramientas más tradicionales, como las hojas de cálculo, utilizadas por dos de cada diez negocios para gestionar sus facturas. La digitalización avanza lentamente en ciertos sectores, lo que reduce la competitividad y eficiencia de muchas pymes.
Y es que, aunque la Ley Crea y Crece promete impulsar la adopción de tecnologías digitales para facilitar la gestión empresarial y combatir el fraude fiscal, muchos negocios perciben todavía el cambio hacia la digitalización como un proceso complejo y costoso.
Los asesores y gestores siguen siendo fundamentales para los autónomos españoles
Por otro lado, las asesorías siguen siendo un pilar fundamental en la gestión de los negocios en España. El 40% de los autónomos delegan la contabilidad a asesorías especializadas, mientras que el 36% confía en ellas para la gestión de las nóminas. Esta alta dependencia de los servicios de asesoría refleja la complejidad normativa y fiscal que enfrentan los pequeños negocios y subraya la necesidad de contar con apoyo externo para cumplir con las obligaciones legales sin desbordarse.
A pesar de que un 61,4% de los encuestados se muestra satisfecho con sus asesorías, es evidente que aún queda camino por recorrer en términos de mejorar la percepción de valor frente al precio de estos servicios.
El informe concluye que, a pesar de los retos, el panorama emprendedor en España sigue siendo moderadamente optimista. El 54,2% de los autónomos consultados confía en alcanzar sus objetivos para el próximo año, aunque esta cifra es inferior a la de otras regiones europeas. Para muchos, la digitalización y la simplificación de los procesos administrativos son claves para seguir creciendo.