ATA ha publicado su Barómetro del segundo trimestre de 2024

Sólo el 22% de los autónomos ha comunicado sus ingresos reales y, de ellos, un 32% se ha subido la cuota

ATA estima que la diferencia que tendrán que abonar los autónomos tras la regularización estará en torno a los 1.000 euros.
La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) ha publicado este lunes su Barómetro trimestral, en el que se muestra que sólo unos 745.000 autónomos han comunicado su previsión de ingresos a la Seguridad Social. De ellos, sólo el 32% se ha subido la cuota.

Hasta el momento, la mayoría de los autónomos no han informado a Seguridad Social de su previsión de ingresos de forma voluntaria, como explicó Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) durante la presentación del Barómetro trimestral de la federación.

El presidente de ATA valoró, a tenor de estos datos, que “la mayor parte de los autónomos va a esperar a la regularización, y una vez que vean el resultado, actuarán”. Así, tan solo cerca de 745.000 -un 22%- trabajadores por cuenta propia encuestados ha comunicado la previsión de ingresos, y un 27% afirmó que no tiene pensado hacerlo. 

La mayoría de los que sí han comunicado su previsión de ingresos mantuvieron su cotización -31%- y únicamente el 32% incrementaron su cuota anticipándose a la regularización de la Seguridad Social. “Prefieren ir abonando las cantidades antes de que llegue la revisión correspondiente”, apuntó el presidente de la federación. El resto, comunicaron sus ingresos pero siguen cotizando lo mismo.

Además los datos del Barómetro mostraron cómo a la mayor parte de los trabajadores por cuenta propia no se les van a reclamar más cuota una vez que se lleve a cabo la regularización, y, de éstos, habrá un gran número de autónomos que renunciarán a la devolución del exceso de cotización, para lo que habrá que esperar a que los agentes de la Seguridad Social crucen los datos con los que se declararon en la pasada campaña de la RENTA. 

En ese sentido, desde la federación estiman que aquellos autónomos que tengan que abonar alguna cantidad a Seguridad Social tras la regularización, como podría ser el caso de muchos autónomos societarios que encuentren cotizando por la base máxima, tendrán que pagar unos 1.000 euros de media, que se corresponden con la diferencia de las cuotas que no abonaron el año pasado en función de sus ingresos reales

ATA afirma que la mayoría de los autónomos no tendrán que pagar más a la Seguridad Social después de la regularización de cuotas

Según las estimaciones de ATA, basadas en los datos de su Barómetro, una vez que los agentes de la Seguridad Social crucen los datos con Hacienda, la mayor parte de los autónomos seguirá pagando lo mismo, no les van a reclamar. “Nosotros analizamos los rendimientos netos declarados por los autónomos en el año 2023, que es el año que fiscalmente acaban de declarar, y la inmensa mayoría de los autónomos van a tener que mantener la cuota que pagan actualmente, no van a tener que pagar más. Incluso, habrá autónomos a los que la Tesorería tendrá que devolver", explicaron desde la Federación.

En concreto, como se recoge en el Barómetro, de aquellos encuestados a los que se preguntó cómo había quedado su cuota tras comunicar su previsión de ingresos, un 32% confirmó que se ha mantenido igual, también tres de cada diez afirmó que ha aumentado su cotización, y un 6,1% apuntó que el importe a abonar ha disminuido, si bien casi el 24% aclaró que lo desconoce. 

A su vez, Lorenzo Amor estimó que, de aquellos trabajadores por cuenta propia a los que la Tesorería deberá devolver el exceso de cotización, serán muchos los que soliciten la renuncia a dicha devolución.

En el peor de los casos, los autónomos tendrán que pagar unos 1.000 euros tras la regularización

Por otro lado, los datos del Barómetro mostraron cómo, si bien en torno a un 25% o 30% de los autónomos van a tener que abonar la diferencia de las cuotas que pagaron el año pasado en función de sus rendimientos netos, se prevé que las cuantías a devolver no serán muy altas. 

En particular, en el caso de los autónomos societarios que se encuentren cotizando por la base máxima, la estimación de ATA ronda los 1.000 euros de diferencia. “Teniendo en cuenta que un autónomo societario está pagando una cuota por encima de 400 euros a día de hoy, y que el tope fijado es de 500 euros para el año 2023, aquellos con rendimientos netos superiores a 60.000 euros, como mucho, tendrán que pagar en torno a 1.000 euros en esa regularización”, apuntó Amor.

Además, aquellos que más están comunicando sus datos y previsión de ingresos a la Seguridad Social son, precisamente, aquellos trabajadores por cuenta propia que tienen ingresos más altos, para evitar que les llegue la regularización “de golpe”, por lo que esto también reducirá las cantidades finales a devolver a Seguridad Social.

Este sistema nuevo implica máxima colaboración entre Gobierno y agentes sociales, por lo que, según avanzó Amor, estarán en comunicación y diálogo “constante”, para que el procedimiento se pueda realizar de la mejor manera posible. “ATA estará durante los próximos meses al lado de los autónomos para ayudarles en lo referente a este tema”. 

Amor avisa de que no admitirá que se calcule la cuota de los autónomos societarios incluyendo otros ingresos

Lorenzo Amor advirtió que ATA estará vigilante para que, en el caso de los autónomos societarios, la Seguridad Social no tenga en cuenta para calcular su cuota más que sus ingresos por la actividad y lo su participaciones en empresas, o sus rendimientos por alquileres, o cualquier otros ingresos. Añl igual que se hace con los asalariados, recordó Amor, que únicamente cotizan por su sueldo. Luego, toco el mundo, abona sus impuestos correspondientes en el IRPF por sus otros ingresos.

“Sólo hay que pagar por los ingresos afectos a la actividad, no por otros conceptos, al igual que el resto de ciudadanos que no son autónomos no cotizan por ingresos que no tienen que ver con el rendimiento del trabajo”, explicó Amor. 

En este aspecto, resaltó que solo se tiene que cotizar por aquellos ingresos que emanan de la actividad económica y “debemos ser muy rigurosos al respecto”.