El aumento de las sanciones a los clientes morosos de los transportistas están mejorando los plazos de pago
Los datos del Plan Nacional de Inspección en el Transporte de Mercancías por Carretera han agradado a los representantes de los autónomos y las pequeñas empresas del sector ya que los plazos en los que cobran sus facturas están mejorando, al menos sobre el papel, gracias al aumento de las sanciones contra los clientes morosos.
El régimen sancionador de lucha contra la morosidad en el sector del transporte y la actividad de los Servicios de Inspección de Transporte están contribuyendo a mejorar los plazos de pago a los transportistas. Y es que una de las principales novedades en la inspección ha sido el incremento del control de dicha morosidad. En concreto, durante 2023 se registraron 4.635 infracciones por incumplir los plazos máximos legales de pago; un dato que contrasta con las apenas 238 de 2022 (+1847%).
“Nos parece perfecto: si se reformó la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT) en 2022, y se estableció un régimen sancionador que penaliza a quienes incumplen ese plazo de 60 días para pagar, el peso de la ley ha de caer sobre las empresas incumplidoras”, explicó a este diario José Carlos López Jato, vicepresidente de la Federación Nacional de Transportistas Autónomos (Fetransa).
Era una de las reivindicaciones de las asociaciones que representan a los autónomos y las pequeñas empresas de transporte. A las que el ministerio del ramo acaba de presentar los resultados del Plan Nacional de Inspección llevado a cabo el pasado año, tanto por el Estado como por las comunidades autónomas, en el transporte de mercancías por carretera.
La gran mayoría de las sanciones a los transportistas por infracciones son leves
En paralelo, las infracciones de los propios transportistas durante el pasado ejercicio dieron lugar a la apertura de 166.540 expedientes, una cifra no excesivamente superior a la registrada en 2022 (144.608 infracciones), que, sin embargo, curiosamente, ha supuesto un ligero descenso de la recaudación; que ascendió a 90,1 millones de euros (frente a los 91 millones de euros del pasado año). Lo que indica un incremento en la levedad de dichas infracciones.
Por lo que respecta a los tiempos de conducción y descanso, se trata, un año más, de las infracciones más habituales detectadas en el marco del Plan Nacional de Inspección, con un total de 71.030 expedientes incoados en 2023 (por los 73.336 de expedientes en 2022). Un descenso, al que acompaña un dato revelador: la mayoría, en concreto, el 74% de las mismas, son de carácter leve. “Es normal que, si exigimos que se cumpla la ley, aceptemos de buen grado que seamos igualmente sancionados si no la cumplimos. Si decidimos arriesgarnos, saltarnos un poco el límite, y pagar los 70 euros de sanción”, continuó José Carlos López Jato.
Otra cosa es que, lejos de ser un problema estructural, sea una simple cuestión de interpretación de las normas. “Ayer mismo denunciaron a un compañero que no registró una carga y descarga, algo de lo que ya se ocupa el tacógrafo inteligente, que recordemos que convive aún con el clásico. Entenderíamos un “a la siguiente serás sancionado”, porque es un poco pronto para exigir que todo el mundo esté al día en el manejo de una tecnología que es aún muy nueva; tal vez dentro de un año no se deba dejar pasar una infracción así, pero juzgamos que es un poco pronto y que no se nos está dando tiempo suficiente para adaptarnos”, añadió el vicepresidente de Fetransa.
En todo caso, José Carlos López Jato calificó de ligero el incumplimiento de los tiempos de conducción y descanso entre los autónomos y las pequeñas empresas de transporte. “Sobre todo, si se juzgan esos en términos relativos esos 71.030 expedientes incoados en 2023, habida cuenta de que hay obligación de inspeccionar varios millones de horas de trabajo”, argumentó.
Según los expertos, es necesario analizar las sanciones por velocidad excesiva de los transportistas
Por su parte, debido a la manipulación del tacógrafo, el pasado año se incoaron en total 104 expedientes sancionadores, frente a los 142 de 2022. Y respecto al limitador de velocidad, las autoridades impusieron un total de 560 infracciones. “En este punto sí que somos un poco críticos con el criterio de la inspección. No es que no funcione bien el limitador, sino que consideramos preciso analizar las circunstancias de cada caso, y ver si se ha tratado simplemente de mala praxis del conductor que, por ejemplo, bajando un puerto pronunciado se haya soltado y no haya empleado el freno lo necesario, y el camión, por su masa, haya superado algo la velocidad permitida”.
Por el contrario, según el representante de esta patronal de autónomos del transporte, “el 99% de las sanciones por manipulación del tacógrafo están perfectamente incoadas”.
En cuanto al control de las jornadas de trabajo de los conductores profesionales, se comprobaron un total de 4.184.388 en 2023, y el número de infracciones se redujo un 25%, tanto en carretera como en empresas, respecto del año anterior. “Una magnífica noticia, porque significa que los autónomos del transporte, además de cumplir cada vez más con los tiempos de conducción y descanso, cumplen más con la normativa laboral, que no es lo mismo: porque los transportistas, cuando nos sentamos al volante, somos ambas cosas: trabajadores y conductores. Y si se han reducido las horas de trabajo, tiene que ver con que cada vez se respeta más la normativa laboral; un dato muy positivo”, según el vicepresidente de Fetransa.
En lo referente a la realización del transporte sin autorización, se impusieron en 2023 un total de 8.698 infracciones, de las que fueron resueltas un total de 6.317, habiéndose sobreseído un total de 503 expedientes sancionadores. Y en el apartado de transporte internacional, se incoaron un total de 1.065 infracciones en 2023 a empresas extranjeras que operan en España, frente a los 803 expedientes incoados en 2022.
En 2023 aumentó el número de sanciones por exceso de peso transportado por carretera
Por último, en materia de excesos de pesos, sí que se produjo en 2023 un incremento en el número de infracciones incoadas: 21.176 expedientes por los 18.167 del año anterior. La mayor parte de ellas se producen en el transporte público de mercancías (el 70% del total), sin embargo, las infracciones más graves corresponden al transporte privado.
Sobre este asunto, José Carlos López Jato se mostró inflexible con las empresas que, por el motivo que sea, no cumplen los requisitos para poder seguir siendo transportistas. Y es que, en el marco del Plan Nacional de Inspección, el número de infracciones del visado de autorizaciones creció un 21%. Se comprobó en 10.211 empresas de transporte de mercancías la vinculación real del gestor de transporte con su compañía, y se detectaron un total de 410 infracciones. “Como consecuencia de la pandemia, se amplió el plazo para realizar el visado hasta el año pasado, como excepción a los dos años que establece el Reglamento de Ordenación de los Transportes Terrestres (ROTT). Pero si, por lo que sea, una empresa no acredita ante la Administración que sigue cumpliendo las mismas exigencias que en el momento en que le dieron la autorización, están muy bien sancionadas”.
Por último, en 2023 se produjo un incremento en las infracciones cometidas tanto en el transporte de mercancías peligrosas (+11%), transporte de mercancías perecederas (+30%) y en lo que se refiere a carencia del Certificado de Aptitud Profesional (+11%).
Fetransa ve necesario inspeccionar más a las falsas cooperativas de autónomos del transporte
El vicepresidente de Fetransa considera que las autoridades deberían de emplearse más a fondo, al menos en un par de inspecciones más: el cabojate ilegal y las falsas cooperativas de transportistas autónomos. “No digo centrarse sólo en este tipo de inspección, pero sí dedicarle un poco más de tiempo, porque la realidad no se compadece bien con las estadísticas que muestran los Servicios de Inspección de Transporte. Pero claro, perseguir el que conductores portugueses estén llevando a cabo su labor dentro de territorio español, sin el permiso correspondiente, es de difícil inspección y el esfuerzo no parece merecer la pena para los resultados obtenidos finalmente”.
El portavoz de Fetransa considera necesario llevar a cabo campañas puntuales sobre estos dos tipos de fraude, “que inciden mucho en temas como la competencia desleal, la seguridad vial y los derechos de los trabajadores, y, sin embargo, las autoridades no les prestan la debida atención”.
