La nueva normativa de seguridad de ascensores dispara la actividad de los negocios de reparaciones

La nueva normativa de seguridad de ascensores está disparando la actividad del medio millar de negocios de mantenimiento y reparación de aparatos elevadores que se reparten el mercado español. Un colectivo que alcanzó un volumen de negocio de alrededor de 2.625 millones de euros en 2023.

Desde el 1 de julio, está vigente la nueva Inspección Técnica Complementaria (ITC) introducida por el Real Decreto 355/2024. Esta normativa afecta de manera significativa a los negocios encargados de la gestión de ascensores, con un impacto económico sobre el sector que se ha calculado cercano a los 1.000 millones de euros durante los próximos siete años. La ITC AEM 1, como se denomina esta nueva reglamentación, regula la puesta en servicio, la modificación, el mantenimiento y las inspecciones periódicas obligatorias de todos los ascensores de nuestro país.

España es el primer país europeo en número de ascensores por habitante

Lo cierto es que en España hay en torno a los 1,2 millones de ascensores, de manera que encabeza, y con diferencia, la clasificación europea en elevadores por persona. Así, y puesto que en nuestro país existen 19,8 aparatos por cada 1.000 habitantes, según un estudio de Eurostat y Credit Suisse, estamos muy por encima de los apenas diez ascensores que hay de media en los Veintisiete. La causa no es otra que el hecho demográfico de que las españolas son las familias europeas más habituadas a vivir en edificios de pisos, más que en viviendas unifamiliares o adosadas.

El problema –y la oportunidad para los negocios– es la antigüedad de dichos elevadores. Y este reglamento busca precisamente equiparar la seguridad de los equipos más antiguos con los nuevos, incorporando dispositivos de protección y sistemas de comunicación bidireccional obligatorios, entre otros cambios. Para valorar el nuevo marco normativo, IFMA España, la filial española de la International Facility Management Association, ha publicado el documento Movilidad Vertical: normativa a tener en consideración.

Como explicaron desde esta organización, España cuenta con uno de los parques de ascensores más envejecidos de su entorno, ya que más del 50% de los aparatos superan los 20 años de antigüedad. Por eso, el documento destaca que la ITC AEM 1 “era una medida necesaria, que llevaba varios años barruntándose en diferentes borradores y discusiones de las partes implicadas, pero que ya está aquí y corresponde abordarla con la mayor responsabilidad posible”.

La nueva normativa de ascensores va a tener un impacto significativo entre los negocios especializados en su reparación y mantenimiento

La nueva normativa tendrá un impacto significativo entre los negocios especializados en la reparación y el mantenimiento de ascensores. Las empresas conservadoras deberán disponer de un plan de mantenimiento para cada cliente y un manual de funcionamiento para cada tipo de ascensor en un plazo de uno a dos años, además de actualizar su acreditación en la consejería de Industria (o afín) de su comunidad autónoma, en un plazo de 1,5 años.

Por su parte, los propietarios de edificios o las comunidades de vecinos deberán adaptarse para incrementar la seguridad según las nuevas normativas, lo que incluye la presentación de documentación técnica y la contratación de inspecciones periódicas para hacer frente a las oficiales de los propios organismos autonómicos.

También se recogen los siguientes cambios en los elementos de seguridad:

• Puertas automáticas. Incorporación de dispositivos de protección en un plazo de seis meses a un año.
• Comunicación bidireccional. Obligatoria en todas las cabinas en un plazo de un año.
• Dispositivo de sobrecarga. Que impide el funcionamiento en caso de sobrecarga en cabina, con un plazo de un año.
• Precisión de nivelación. Requiere precisión de parada y nivelación estricta en un plazo de seis meses a un año.
• Movimientos incontrolados. Instalación de medidas efectivas para evitar los movimientos incontrolados de los ascensores.

Los negocios especializados también tendrán que adaptarse al nuevo reglamento

El documento Movilidad Vertical: normativa a tener en consideración señala que la nueva reglamentación afectará a los pequeños negocios de mantenimiento y reparación en varios aspectos clave: será necesario mantener una documentación y registros detallados, invertir en la formación del personal, realizar inversiones iniciales y gestionar aumentos en los costes operativos, que se verán posteriormente compensados por el aumento de facturación.

Por tanto, estos especializados deberán analizar cuidadosamente a los proveedores para asegurar que cumplan con los nuevos requisitos normativos, y realizar evaluaciones periódicas para garantizar el cumplimiento continuo. Además, deberán planificar las posibles interrupciones en el servicio y mantener una comunicación clara y transparente con los usuarios para gestionar sus expectativas durante la implementación de estos cambios.

Como señalaron los expertos de IFMA España, aunque estos cambios pueden representar un desafío inicial en términos de costes y gestión, el cumplimiento de la ITC AEM 1, así como el resto de las normativas vigentes que también se repasan en el documento, “será una inyección económica importante para el sector, además de mejorar de forma significativa la seguridad y eficiencia de los ascensores en España”, además de la calidad del mantenimiento de los ascensores y otros equipos de elevación también incluidos en la nueva reglamentación.