Los asesores fiscales (AEDAF) reclaman impuestos más beneficiosos para las empresas familiares

La Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF) celebró esta semana dos jornadas sobre la tributación de las empresas familiares en el Palacio de la Magdalena de Santander, donde reclamaron una fiscalidad más justa y beneficiosa para los pequeños negocios. Especialmente, para las empresas familiares.

La empresa familiar es, para AEDAF, uno de los tipos de negocio más importantes de la economía española. Por ello, pidieron al Gobierno “que comprendan la singularidad de la empresa familiar y diseñen políticas fiscales que las apoyen. Sin una fiscalidad adecuada y un marco normativo estable, ponemos en riesgo la continuidad de estos negocios”, advirtieron.

AEDAF ha organizado las dos jornadas en un contexto donde los costes que están teniendo que asumir las empresas familiares, tanto en términos de tributación como de otras obligaciones, no han parado de subir. Prueba de ello es la denuncia que hicieron hace unos meses, como recogió este diario, advirtiendo que muchos negocios de este tipo no podrán asumir el coste de las nuevas obligaciones en sostenibilidad.

Todo, sumado a otros problemas, como la falta de relevo generacional en los pequeños negocios. Según un reciente estudio, el 60% de las empresas familiares tendrán que cerrar en los próximos años por las dificultades de encontrar un sucesor que se haga cargo de la actividad a medida que los autónomos se vayan jubilando.

El Transporte, el Comercio y la Hostelería son los sectores más afectados por la crisis de la empresa familiar

Por sectores, el Transporte, el Comercio y la Hostelería son los más afectados por la falta de relevo generacional. Algo que llevan meses denunciando las asociaciones de autónomos del sector, que atribuyeron una parte importante de este problema a los costes y las condiciones que se les exigen en sus sectores.

Se trata de una cuestión preocupante, que también podrían ser un problema social en los próximos años. Especialmente, en las zonas rurales, donde los autónomos suelen contar con una edad media mayor y encuentran más dificultades para conseguir un relevo generacional en sus comercios, bares y restaurantes, lo que deja sin oferta a estas áreas.

Así, al problema de la falta de relevo generacional se suman otros, como una fiscalidad estricta, tal y como denunciaron desde AEDAF, y otros costes, como los laborales, que no han parado de crecer en los últimos años a causa del incremento del SMI. Y que podrían seguir haciéndolo, si el Gobierno finalmente aprueba las medidas previstas, como la reducción de jornada a 37,5 horas semanales.