El 60% de los españoles no descarta la posibilidad de emprender en el futuro

Los impuestos y las trabas administrativas son los principales frenos al emprendimiento, según CEOE

CEOE y la consultoría GAD3 han elaborado un estudio sobre la situación del emprendimiento en España. A pesar de que la mayoría de los jóvenes no descartan abrir su propio negocio, los impuestos y las trabas administrativas son los principales motivos de que no lo terminen haciendo.

Burocracia, financiación e impuestos, trabas para que los jóvenes creen más negocios, como desearían.
Burocracia, financiación e impuestos, trabas para que los jóvenes creen más negocios, como desearían.
Los impuestos y las trabas administrativas son los principales frenos al emprendimiento, según CEOE

Poner en marcha un negocio es una opción cada vez más atractiva para muchos españoles. Así al menos lo pone de manifiesto el reciente estudio titulado El Emprendimiento en España, presentado por CEOE y la consultoría GAD3, que no sólo aborda la situación actual de los emprendedores, sino que evalúa también el potencial emprendedor y la percepción que la sociedad tiene sobre esta figura, esencial en el tejido económico y social.

En ambos aspectos, sus datos son alentadores, pues revelan un notable optimismo en cuanto a la actividad emprendedora, evidenciado por el hecho de que un 60% de los españoles no descarta la posibilidad de abrir un negocio en el futuro. De hecho, sólo uno de cada diez rechaza por completo la idea de convertirse en autónomo.

El tono general del estudio, presentado por Lorenzo Amor, presidente la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) y vicepresidente de CEOE, y por Narciso Michavila, presidente de GAD3, revela una actitud positiva hacia el emprendimiento, lo que se refleja un cambio cultural significativo: cada vez más personas valoran la independencia y la innovación que conlleva ser autónomo y abrir un negocio por cuenta propia. Así, muchos jóvenes están dispuestos a tomar el riesgo asociado con iniciar una actividad empresarial: aproximadamente el 20% de los menores de 30 años ya ha comenzado su propio negocio.

Las trabas administrativas y los impuestos son los principales frenos al emprendimiento en España

Junto a estos datos, el estudio El Emprendimiento en España proporciona además una visión detallada de los desafíos y barreras a los que se enfrentan los emprendedores en España. Estos obstáculos representan aspectos significativos del ecosistema emprendedor que pueden impedir o dificultar el lanzamiento y el desarrollo exitoso de nuevas empresas.

Una de las principales barreras identificadas en el estudio es el alto nivel de impuestos. Un destacado 87% de los emprendedores encuestados señala los impuestos como un obstáculo significativo, lo que refleja la carga fiscal que pesa sobre los nuevos negocios y los autónomos en España. Esta percepción está ampliamente respaldada por la comunidad emprendedora, que considera que la fiscalidad puede ser prohibitiva y desincentivar la iniciativa empresarial.

Las trabas principales para que los jóvenes creen más negocios son: Burocracia, financiación e impuestos.
Las trabas principales para que los jóvenes creen más negocios son: Burocracia, financiación e impuestos.

La financiación es otro desafío crítico. Con el 77% de los emprendedores que indica dificultades para acceder a recursos financieros adecuados para iniciar o expandir sus negocios. Esta barrera es particularmente prominente entre los jóvenes emprendedores, pues el 79% destaca el acceso a la financiación como una limitación mayor, complicando así sus esfuerzos para establecer y hacer crecer sus empresas.

Además, los trámites burocráticos representan un muro considerable, mencionado también por el 77% de los encuestados. La complejidad y el tiempo requerido para navegar por los procesos administrativos pueden desalentar a muchos potenciales empresarios, quienes pueden sentirse abrumados por la cantidad de regulaciones y la lentitud de los procedimientos oficiales.

Las mujeres emprendedoras se enfrentan a desafíos adicionales, como la conciliación

Todas estas barreras afectan de manera desproporcionada a ciertos grupos demográficos. Las mujeres emprendedoras, por ejemplo, se enfrentan a desafíos adicionales que incluyen la conciliación de la vida laboral con la personal, un factor que 58% de ellas identifica como una preocupación significativa. Esto subraya la necesidad de políticas más inclusivas y de apoyo que aborden las necesidades específicas de las mujeres en el ámbito empresarial.

Para superar estas barreras, el estudio sugiere la implementación de políticas que fomenten un entorno más amable para los emprendedores. Lo que podría incluir una reforma fiscal para reducir la carga impositiva sobre los nuevos empresarios, la simplificación de los trámites burocráticos para hacer más ágil el proceso de creación de empresas, y la mejora de los mecanismos de financiación para revertir su accesibilidad a un espectro más amplio de emprendedores.

Lorenzo Amor concluyó la presentación del informe haciendo hincapié en la confianza que la sociedad deposita en las empresas. “Son la institución en la que más se confía, lo que resalta la integración y el respaldo social que disfrutan los autónomos en este país”. Algo fundamental, ya que, según él, “el apoyo de la sociedad es crucial para el éxito de los nuevos negocios y para fomentar un entorno en el que el emprendimiento pueda florecer”.

Nueve de cada diez jóvenes emprendedores volverían a abrir sus negocios

A pesar de los desafíos, una gran proporción de quienes han emprendido valora positivamente su decisión. El informe destaca que nueve de cada diez jóvenes emprendedores volverían a elegir este camino, lo que no sólo subraya la satisfacción con sus elecciones, sino también la existencia de oportunidades percibidas dentro del ecosistema empresarial del país.

Los jóvenes desearían poner en marcha más negocios.
Los jóvenes desearían poner en marcha más negocios.

Durante su presentación, Lorenzo Amor subrayó la importancia de los autónomos en el desarrollo económico y social de España, enfatizando que tener un negocio propio en este país “es un desafío lleno de responsabilidades, pero también de enormes satisfacciones”. Para el presidente de ATA, emprender en España es una oportunidad única para transformar ideas en realidades tangibles, “que no sólo crecen y se fortalecen con el tiempo, sino que se convierten en pilares de la economía nacional”.

Por su parte, Narciso Michavila resaltó que, de acuerdo con el estudio, nueve de cada diez jóvenes emprendedores volverían a elegir ser autónomos como su salida profesional, “lo que no sólo subraya la vitalidad del espíritu ambicioso entre los jóvenes españoles, sino que también sugiere un fuerte compromiso con la prosecución de carreras de índole empresarial, a pesar de los desafíos inherentes”.

Y es que, aunque el camino del emprendedor no está exento de dificultades, el fuerte apoyo social y la alta valoración del emprendimiento facilitan un entorno en el que los nuevos negocios pueden nacer y crecer. Este ambiente positivo es crucial para fomentar una mayor aceptación y alentar a más individuos a considerar el negocio por cuenta propia como una alternativa profesional viable y gratificante.

El 17% de los encuestados valora la independencia de abrir negocio por cuenta propia

El estudio destaca no sólo los incentivos personales, sino también las recompensas profesionales que conlleva esta elección vital. Así, entre las motivaciones para emprender, una de las revelaciones más significativas del estudio es el auge de la búsqueda de autonomía, citada por el 17% de los encuestados. Este deseo de independencia refleja una tendencia creciente hacia el autoempleo, donde los individuos buscan mayor control sobre su vida laboral y decisiones. La vocación y la pasión por un proyecto propio se sitúan como la segunda motivación, con un 15%. Muchos emprendedores están guiados por el deseo de realizar una labor que encuentran significativa y gratificante.

Burocracia, financiación e impuestos, mayores trabas a la hora de emprender.
Burocracia, financiación e impuestos, mayores trabas a la hora de emprender.

Ser el propio jefe es otro estímulo clave, mencionado por el 13% de los participantes. Esta motivación destaca el deseo de escapar de las estructuras jerárquicas tradicionales y gestionar personalmente el rumbo de la actividad profesional. Así, entre los jóvenes emprendedores, el 24% destacó la posibilidad de mejorar sus condiciones laborales como un motivo fundamental, lo que indica una preocupación por encontrar mejores oportunidades de empleo que las ofrecidas por el mercado.

En términos de beneficios, el estudio muestra que un 62% de los emprendedores en general reportan sentirse satisfechos o muy satisfechos con su experiencia de emprender. Esta cifra es especialmente alta entre los jóvenes emprendedores, donde casi ocho de cada diez expresan una percepción positiva de su experiencia emprendedora. Esta satisfacción puede atribuirse a diversos factores, como la realización personal, el desarrollo de nuevas habilidades y la contribución a la economía.

La posibilidad de conciliación de la vida laboral con la personal también es un beneficio destacado, especialmente entre las mujeres emprendedoras. El 58% de las encuestadas apunta una valoración positiva de su experiencia, en parte debido a la flexibilidad que el emprendimiento permite en comparación con los roles tradicionales. Esto es crucial en contextos donde la conciliación laboral y familiar sigue siendo un desafío significativo.