La Inspección reclama a los negocios la devolución de algunas bonificaciones de los cursos para empleados

La Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) ha comenzado a reclamar a algunos autónomos y pymes parte de las bonificaciones que disfrutaron sobre los cursos de formación para sus empleados en 2021. Según afirmaron, ya han enviado casi 21.000 notificaciones a las empresas y autónomos con asalariados que ofrecieron a éstos algún curso de Formación Profesional para el Empleo (FPE).

Las cartas enviadas por la Inspección se dirigen a aquellos negocios que, tras la revisión, bonificaron indebidamente los cursos de formación que ofrecieron a sus empleados en 2021. En ellas se solicita la devolución de estas reducciones, que pueden alcanzar el 100% del importe de los cursos.

El plazo para devolver estas cantidades se extenderá hasta el próximo 15 de septiembre. Pasada esta fecha, los negocios que no hayan devuelto las bonificaciones que aplicaron en 2021 por Formación Profesional para el Empleo podrían sufrir sanciones y recargos, según explicaron desde la Inspección.

La Formación Profesional para el Empleo es un tipo de formación que los negocios pueden ofrecer a sus asalariados para actualizar sus competencias. A cambio, la Seguridad Social bonifica parte -o el total- del coste de estos cursos, dependiendo del volumen de la plantilla y los importes que hayan aportado durante el año anterior en concepto de Formación Profesional. En el caso de los negocios más pequeños, la Administración puede llegar a hacerse cargo del 100% del importe.

Los negocios a los que se les reclame bonificaciones de los cursos para sus empleados podrán devolverlas en varios plazos

Desde la Inspección de Trabajo y Seguridad Social explicaron que, en caso de ser notificados, los negocios tendrán hasta el próximo 15 de septiembre para devolver las bonificaciones que se les reclaman sobre los cursos de Formación Profesional para el Empleo que disfrutaron sus asalariados. En concreto, la ITSS ya ha enviado 20.841 notificaciones, aunque el número de negocios afectados podría ser mayor en los próximos meses.

Respecto a las cantidades a devolver, varían en función del tipo de curso que hayan realizado sus empleados -y del coste de éste-, así como del tamaño de la plantilla y los importes que aportaron en 2020 en concepto de Formación Profesional, dentro de la parte de cotización que corresponde a la empresa.

Sobre su devolución, los negocios que sean requeridos para devolver las bonificaciones indebidas de los cursos de Formación Profesional para el Empleo de 2021 podrán fraccionar estas cantidades en plazos mínimos de 100 euros, después de la modificación para abonar las cantidades indebidas que entró en vigor hace apenas un mes, como contó este diario.

Los negocios cuyas bonificaciones de 2021 hayan sido consideradas indebidas por parte de la Inspección deberán devolver estas cantidades en el plazo indicado “en la cuenta corriente del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE)”, el organismo encargado de gestionar estas bonificaciones.

En caso de no cumplir con los plazos marcados por Seguridad Social para devolver estas cantidades, desde la Inspección recordaron que los negocios se podrían enfrentar a dos consecuencias. Por un lado, “el inicio de expediente liquidatorio o procedimiento sancionador”.

Por otro lado, si “finalizado el plazo indicado para la devolución, no se ha devuelto la cantidad reclamada”, explicaron, “se iniciará actuación inspectora por la respectiva Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social, a efectos de practicar acta de liquidación y, en su caso, acta de infracción.

Los autónomos pueden bonificar hasta el 100% de la formación que ofrecen a sus empleados

La Formación Profesional para el Empleo (FPE) es un sistema bastante utilizado por los autónomos y pequeños negocios para mejorar las competencias de sus trabajadores de manera gratuita o a bajo coste. Aunque, en realidad, son ellos mismos quienes anticipan el coste de estos cursos, a través de las cotizaciones de Formación Profesional del año anterior.

Sobre este asunto, cabe recordar que los autónomos también pueden beneficiarse de algunos de los cursos que ofrece el SEPE. Sin embargo, el colectivo ha venido denunciando que la partida presupuestaria que se destina a su formación es mucho más reducida que la de los asalariados. Todo, a pesar de que también cotizan con sus cuotas para esta formación desde 2019.

Así, en función del número de empleados en plantilla y las cotizaciones aportadas a la Seguridad Social durante el ejercicio anterior, las cuantías máximas bonificables varían, según explicaron desde la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (Fundae).

Para calcularlo, la institución explicó que el negocio debe multiplicar la base de “otras cotizaciones” del ejercicio anterior por el 0,7%. El resultado será el “crédito” máximo disponible para que el negocio destine a las bonificaciones en los cursos. En el caso de los negocios de menos de cinco asalariados, la cuantía mínima es de 420 euros.

A partir de aquí, las bonificaciones contempladas, dependiendo del tamaño del negocio, son las siguientes:

• Plantilla de 1 a 9 trabajadores: el 100% del coste de la formación.
• Plantilla de 10 a 49 trabajadores: el 75%.
• De 50 a 249 trabajadores: el 60%.
• A partir de 250 asalariados: el 50%.