Está presente en Europa, Oriente Medio y Estados Unidos

Este emprendedor ha logrado crear un negocio de joyas asequibles con sólo 500 euros y ya factura un millón

Aitor Gómez es el fundador de Bonai, una marca de joyería de lujo pero “asequible” que promocionan celebridades e influencers. Su negocio empezó con una inversión de apenas 500 euros y ya factura un millón de euros al año.

Este emprendedor ha sabido crear un negocio de joyería de lujo asequible y factura un millón de euros.
Este emprendedor ha sabido crear un negocio de joyería de lujo asequible y factura un millón de euros.
Este emprendedor ha logrado crear un negocio de joyas asequibles con sólo 500 euros y ya factura un millón

Bonai es el nombre de una firma de joyería de lujo, pero “asequible”, que promocionan celebridades e influencers y está presente en Estados Unidos y varios países de Europa y Oriente Medio. Este negocio familiar se ha ido consolidando poco a poco con una premisa clara: ofrecer productos de calidad a precios justos.

Detrás de Bonai está Aitor Gómez, un joven emprendedor que, con apenas 500 euros de inversión, se lanzó a poner en marcha una marca que a día de hoy ya factura un millón de euros al año.

“En Colombia encontré un taller pequeño donde creaban bisutería gracias a iraka, un tipo de palmera local: dejaban secar la hoja, la deshilachaban, la teñían a mano y luego la tejían de diferentes maneras para crear pendientes, collares...”, explicó a este diario Aitor Gómez. “Allí compré mi primera colección, que me traje a España y que fue un éxito total. Y hasta ahora”.

Ese “hasta ahora” suena sencillo, pero resume una experiencia vital que llevó a este joven emprendedor –quien desde su infancia ya sentía conexión con las artes plásticas, la fotografía o el cine– a estudiar Periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid. Tras graduarse, comenzó su andadura profesional en la agencia de noticias Europa Press. Donde disfrutaba de su trabajo, pero sentía que algo le faltaba. La monotonía del día a día y la falta de oportunidades para expresar su creatividad le llevaron a buscar un nuevo propósito.

Un viaje a la India cambió la vida de este joven emprendedor, que decidió crear su propia marca de joyas

Aquel momento de insatisfacción fue el catalizador para lo que vendría después: una marca de joyería que “celebra la feminidad” y ofrece productos de alta calidad a precios justos. “Joyas inspiradas y dedicadas a la mujer en todas sus versiones: joven, adulta, mayor, rubia, morena, pelirroja, alta, baja, delgada, curvy, madre, soltera, casada, hetero, LGTBI...”, apuntó Aitor Gómez.

Pero el verdadero cambio de rumbo en la vida de este joven emprendedor se dio durante un viaje a la India en 2017. Una experiencia que marcó un antes y un después, pues recorrió el país durante dos meses, explorando desde el majestuoso Taj Mahal hasta las intrincadas calles de Varanasi y los campos de té de Munnar. Fue en esta última ciudad donde conoció a Saniya, una viuda que dirigía su propio taller de joyería, que no sólo le enseñó sus técnicas artesanales, sino que compartió también con él su filosofía de vida. “Dirige tu vida hacia lo que más te guste y te sentirás agradecido”. Este consejo fue el impulso final que necesitaba para iniciar su propio proyecto.

Aitor Gómez, creador de la firma de joyería asequible Bonai.
Aitor Gómez, creador de la firma de joyería asequible Bonai.

Dos años después, y con ese capital inicial de 500 euros, Aitor Gómez comenzó a vender las piezas que había traído de Cartagena de Indias en pequeños eventos y a través de su propia red de contactos. Su madre, Boli, fue una pieza clave en estos primeros pasos, apoyándole en todo momento y ayudando en la logística y la atención al cliente.

La pequeña estructura de Bonai le permitió adaptarse rápidamente a los desafíos que trajo consigo la pandemia de la Covid 19. Mientras muchas empresas luchaban por sobrevivir, esta joven empresa se benefició del auge del comercio electrónico. “Aproveché el momento para profesionalizar mi sitio web y mejorar la experiencia de compra online”. La marca comenzó a ganar popularidad gracias al boca a boca y a la promoción de celebridades e influencers, quienes se enamoraron de las piezas únicas y accesibles de la marca.

Emplea plata de ley y oro de 18 quilates, “porque lo hermoso no está reñido con lo duradero”.

La firma se ha consolidado como una empresa emergente, aunque con una visión clara: crear joyas que honren la feminidad en todos sus aspectos. Aitor Gómez y su madre trabajan juntos en el proceso de diseño, asegurándose de que cada pieza refleje los valores fundamentales de su creador: calidad, atemporalidad y accesibilidad. Utilizan materiales de alta calidad como plata de ley 925, baños de oro de 18 quilates, y cuarzos hidrotermales, garantizando que sus productos no sólo sean hermosos, sino también duraderos.

“El compromiso de Bonai con la inclusión es otro de los pilares mi marca”, señaló el emprendedor, que ha creado una línea de joyas pensada para todas las edades, estilos o situación personal. “Un enfoque inclusivo que ha resonado en una amplia audiencia, y han granjeado a la marca una base de clientas leales, que aprecian tanto la calidad de las joyas como el mensaje que hay detrás de ellas”.

Un negocio de joyería de lujo asequible que factura un millón de euros gracias al buen hacer de este emprendedor.
Un negocio de joyería de lujo asequible que factura un millón de euros gracias al buen hacer de este emprendedor.

A pesar del crecimiento exponencial de la empresa, Aitor Gómez sigue comprometido con mantener la esencia familiar del negocio. Así, su madre continúa siendo una figura central en la compañía, ayudando en todos los aspectos del negocio. Y esa estrecha relación entre madre e hijo no sólo ha fortalecido la estructura interna de la empresa, sino que también ha añadido un toque personal y auténtico que las clientas valoran. “Aun así, como emprender tiene también una parte con menos glamour, que es la de llevar bien las cuentas y planear el futuro comercial, me asocié recientemente con dos socios que conocen a fondo el mundo de la empresa. Y constituimos un triángulo perfecto: uno es experto en marketing, otro en finanzas y yo, en diseño y producto”.

El tique medio de las joyas de Bonai ronda los 80 euros

El tique medio de sus joyas ronda en la actualidad los 80 euros. “Pero tenemos un rango de precios muy amplio: los pendientes, que se venden por unidades, porque nadie tiene por qué adquirirlos por parejas, si no lo desea, valen 17 euros. De ahí a un collar de 300 euros hay toda suerte de piezas”.

De cara al futuro, Aitor Gómez tiene grandes planes para su negocio. Con una estrategia de expansión internacional en marcha, la marca ya está presente en ciertos países de Europa y Oriente Medio, y en Estados Unidos. “El grueso de las ventas se hace en línea, y seguirá siendo así; no tenemos pensado abrir ninguna tienda física, más allá de algún pop up [espacios itinerantes y/o temporales] coincidiendo con algún evento muy concreto”. Al decir de su creador, Bonai va a seguir trabajando su promoción a través de influencers. “Ayudan mucho a dar nombre a la marca. Es un canal de difusión espectacular. Pero que conste que nunca las hemos contratado: nos remitimos a enviarles nuestras joyas y, si les gustan, las publicitan”.